Paralelas Cruzadas

Que estudias?

grado de información y documentación
bueno, antes se llamaba diplomatura xD

Juer pues yo voy a estudiar ciencias de la comunicación audiovisual. Para después de haber sido famosa .

parece un coñazo...

Me encanta!
Sube mas, porf.
Pobre Alec...

Wiiiiiiii haber si subis cosas que estoy deseando leerlas!^^.
Un día de estos retomare mis horas escribiendo...aunque siempre me quedo parada y lo termino borrando. Nunca he terminado ninguna historia.

Me pican los ojos!!! juer! Me vooy a ensayar mi super escala a dos octavas con dos manos al piano!!
Taluego!

Sin compartir? Malaaaaa

Pongo el capitulo xD
Espero que os guste.
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Capitulo 2: Convicción.

Después de un par de días, Alec, al ver que Magnus no le respondía a ninguna de sus llamadas, decidió irse durante un rato a la casa de Magnus, estaba realmente preocupado y no había dormido esos días casi por lo que le había dicho, sentía que extrañaba al mago con cada parte de su cuerpo... y necesitaba verlo... YA! no podía esperar más.
Cuando llegó a su casa, fué corriendo hasta su rellano y empezó a tocar con el puño, gritandole a Magnus que le abriese.
A los 10 minutos empezó a pensar que no estaba, hasta que oyó a Presidente Miau maullar... Si Magnus se hubiera ido se habría llevado a su gatito. Y empezó de nuevo a gritar su nombre, cada vez con más desesperación.
Cuando finalmente se cansó de llamar, empezó a bajar las escaleras...

Magnus, al otro lado de la puerta, tenía cogido a Presidente Miau de manera que no pudiera hacer sonido alguno.
- Debes olvidarte de mí Alec, por mucho que quiera llevarte, es demasiado peligroso para tí, y lo único que espero y que deseo es que sigas viviendo-. Dijo casi en susurro Magnus mientras se le caía una fugaz lágrima por su mejilla.
Desgraciadamente para él, Alec había fingido irse y había escuchado a través de la puerta lo que el mago había dicho, y ahora, seguro de que él estaba en su casa, empezó a amenazar con tirar de la puerta si no le dejaba entrar.

Después de varios gritos, amenazas, quejas por parte de los vecinos, Magnus se rindió y empezó a abrir la puerta, había aguantado menos de lo que pensaba, ese cazador de sombras de verdad era su debilidad...

Cuando Magnus hubo abierto la puerta lo suficiente para que pasara, se lanzó a sus brazos como si hiciera semanas, años, siglos que no lo veía y casi sin darse cuenta, le metió la lengua todo lo que pudo... Magnus por su parte, le recibió con iguales ansías ronroneando... Dios, cuanto había echado de menos esos ronroneos...

Magnus, al ver que a este paso no lograría que Alec se olvidase de él si no dejaba de ronronearle ni de besarle, se separó de él lo más bruscamente que pudo, y puso la mayor distancia entre uno y otro.
- Ya queda poco para que me vaya, `¿porqué has venido? si vienes dentro de poco no me encontrarás... así que se breve.
- Ya puedes hacerte el duro, y negarte todo lo que quieras, he hablado con todos, y dentro de un par de días me voy contigo, si te niegas a que te acompañe, te seguiré, y te terminaré encontrando, da igual lo que tarde, lo que necesite, los problemas que tenga, me da igual todo, no te lo volveré a repetir, pero me importas más que cualquier cosa y te necesito, así que pienso ir contigo, te guste o no.- Dijo el joven cazador de sombras sonrojado.
- ¿Es que no lo entiendes? es muy peligroso, podrían matarte mañana.
- Magnus, Soy un cazador de sombras, estamos en peligro de muerte constante. Y además, preferiría morir cerca tuya que vivir lejos de tí.
- No digas tonterías, no es algo discutible.

Alec, al ver que no conseguiría nada discutiendo, se decidió por otra tecnica.
- Enga, ¿me dirás que no me has echado de menos?.- Empezó a decir mientras se quitaba la chaqueta y la camisa que llevaba.-.¿ Ni tan solo un poquitoo?
Cuando se hubo quitado la camisa, vió en la cara que Magnus empezaba a caer. Y empezó a acercarse a él.
- Sabes que yo te he echado mucho de menos... - dijo poniendose esta vez sobre sus rodillas y lamiendole el lobulo de la oreja.
- Alec, sabes que no ...- Empezó a decir, pero fue cortado por un ardiente beso de su Cazador de sombras.
Esta vez no pudo evitarlo, empezó a besarle con unas ansías que no creía que fueran suyas.
- Eres una mala persona, morenito, ahora vas a recibir lo que te mereces.- Dijo Magnus cogiendo al chico y poniendose encima suya, empezó a morderle el labio para luego pasar a lamer su cuerpo. Se fue parando por los puntos débiles de Alec. Empezó a morderle el cuello. lo cual hizo que Alec respondiera con un gemido...
Alec empezó a acariciar su ardiente piel y al llegar a la fria cadena de su cinturon, empezó a tirar de él hacia abajo. Al ver que su Mago le correspondía, decidió que ya era el momento de ganar. Se separó de él todo lo que pudo y hizo que él le mirase a la cara.

- Magnus, O me dejas venir contigo, o te dejo así, a medias.
- Cariño mio, ¿a tí te parece que en el estado en que estás vas a ser capaz de irte?- Dijo mirando lujuriosamente hacia el bulto que salía de sus pantalones.
- Sí.- djo medio sonrojado-. O me dejas venir contigo o me voy, lo digo en serio, no puedo seguir estando contigo si luego me vas a dejar cuando estemos en el momento de después.
- Alec, no me hagas esto, lo hago por tí.
- Si de verdad me quieres o haces algo por mí, deberías saber que lo único que quiero tener a mi lado eres tú.
- ¿Y si mueres por mi culpa?
- Bueno, he estado muchas veces a punto de morir y creo que tu me has rescatado de todas, así que no veo porqué no puedes hacerlo otra vez.
- Porqué esta gente es distinta a lo que has visto hasta ahora.
- Me da igual, yo vengo contigo. No puedo estar sin tí... - Se le quebró la voz, lo decía muy en serio, haber si el mago se daba cuenta de que no tenía oportunidad de cambiar la realidad.
- Bueno, pichoncito mio, yo te prometo que me lo pensaré, pero ahora ven a la cama, que ese bulto que tienes ahí parece que me llama, así que o vienes tu, o voy yo y te arrastro a la cama.- le dijo dejandose llevar por la lujuria, o lo tenía ahí ya o tendría serios problemas.
Alec, satisfecho de sí mismo, fue hacía la cama de su Mago. Esperando lograr ir con él, aunque suponía dejar todo lo que tenía, estaba seguro de que era o con él o nada.


Tened piedad de miii

Oooooooooooooooooooooooooooooooooooooh!!!!

Que monos!
Esta muy bien, ya te lo he dicho pero da =, lo vuelves a leer

Donde estará Lenny??