The Darkness: La oscuridad.

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh

me encanta!!!

amo a adrian!!!

esto es tan dulce....

la verdad q el principio de este pedazo me descoloco...soy un poquitin malpensada, a veces..

segui!!!

bessoss

jajaja!!!!! si, la verdad es que el comienzo de este caxito puede dar lugar a equívocos!!!! jajaj!!! cuando pueda, subo mas!!! un besazo breyo!!!

¡Que bonitoooooooooooooooooooo!

Ais! por poco se besan!

me encanta esta historia & como escribes
espero que sigas pronto.

yo quiero un Adrian para miiii!! es taaaan mono

besos

Eve*

gracias evelyn!!!!! un besazo!!!

DE nada!!!
^.^
pero publica ok??

y si no puedes...bueno avisa para cuando puedes

besos
deseand que continues:


*Eve*

Dios mio como mola!!! entre esto y the huntrees me voy a hacer fan tuyo...
Me encanta la historia, no te desanimes y sigue escribiendo, que vales!
bess
y hasta el siguiente cachito....

ola!!!! gracias, P3fgirl!!!! me ha hecho mucha ilu k te gusten tanto mis historias!!!!!jijiji!!!! mira, por si quieres, tmbien tengo otra historia que se llama Luz y Oscuridad, Primera Parte, Los Caídos. si quieres, pásate y me dices si te gusta, okis???
un besazo!!!!

Ok wapa, logo me paso y te comento...
besss

jo yoli, donde te metesssssss?????????????????????????????????
que hace muxo tiempo que no se te ve por aquí!!! te exaba d menos!!!!!jooooooo.....
bueno, que, te gusta la history??? jejeje...pos eso no es nadaaaaaaaa!!!!!!!!! ya veras, ya.....
voy a colgar otro pokito wapa!!!!!!!
TQM YOLIIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!!!

AKI VAAAAAAAAAAA!!!!!

-No llores, Alex-me susurra, su cálido aliento embriagándome-alguien tan maravilloso como tu no debería llorar.
Adrian…solo pensar en su nombre me produce un aleteo en el estómago. ¿Pero desde cuando era yo tan enamoradiza? ¿Desde cuando había llorado delante de alguien, cuando lo que mas odio del mundo es ver llorar a la gente? Me agarro a la cintura de Adrian y hundo aún mas mi cara en su pecho.
-No deberías decirme esas cosas-digo yo, con la voz amortiguada. Noto como Adrian se remueve.
-¿Por qué no, si es lo que pienso?-quiere saber. Ahora, acaricia mi pelo con una mano.
-Por que…por que parece que te estés riendo de mí-respondo. Se que estoy teniendo esta conversación con el por que no estamos cara a cara.
-¿Riéndome de ti?-se extraña Adrian, y de un fluido aunque suave movimiento, me hace incorporarme y mirarle a la cara. Aunque ya es casi de noche, todavía puedo ver la luz que mana de sus ojos-¿por que piensas eso?
Trago saliva.
-Porque…-es mejor decirlo de una vez-cuando te conocí me trataste peor que a una mierda y ahora eres todo encanto y dulzura. Me descolocas bastante, y no se que pensar. Nunca me había sentido así por nadie…-Vale Alex, cállate ya.
Adrian me mira con la sorpresa dibujada en el rostro. Alza la cabeza hacia el cielo. Tras unos instantes, vuelve a mirarme a mí.
-Se como te traté y lo siento. Tu no me hiciste nada, y yo me comporté como un verdadero imbécil. Me pillaste de malas, eso es todo. Y cuando empezaste a acusarme de la muerte de esa mujer-me remuevo a su lado, incómoda-encolericé. Pensé que tú y yo no cuajaríamos nunca-baja la cabeza y coge un puñado de hierba-pero cuando te vi en el suelo, sangrando…bueno, no podía…simplemente no podía dejarte así.
Ahora soy yo quien le mira fijamente. Las mariposas de mi estómago no me dan ni un respiro. Eso solo puede significar una cosa, y aunque parezca de locos, creo que mis mariposas tienen toda la razón: me estoy enamorando de Adrian.
Siempre había pensado que el proceso de enamoramiento era mucho más largo y complicado. Las pocas veces que hablé con mi madre antes de que se convirtiera en lo que es hoy en día me dijo que enamorarse es algo complejo, y hacerlo de al persona correcta, mucho más.
Pero al mirar a Adrian, algo se mueve en mi interior. Algo que me hace sentir completa. Se que solo lo conozco desde cuando, ¿Un día y medio?.
Pero en este día y medio hemos pasado por cosas que no había experimentado nunca con Peter, ni con ningún otro chico. Acusaciones de asesinato, rescates, incomodidades(como estar medio desnuda en su cuarto, aunque bien visto, no es tan incómodo), canciones, declaraciones, casi beso…Decididamente hoy ha sido el día más completo de mi vida. No me ha faltado de nada.
Tengo que contestar a Adrian, si no va a pensar que me he vuelto tontita.
-Adrian…-digo al fin. Él alza la cabeza-si la culpa también debe ser mía. Siempre voy lanzada a todos los sitios y no me preocupo por la otra persona. Además, he aprendido que se vive mejor si algunas cosas no se dicen en voz alta hasta descubrir si son ciertas o no. Yo también lo siento.
Adrian esboza una sonrisa igual de maravillosa que él.
-Te vi el primer día que llegaste-me dice de pronto, para mi absoluto y total desconcierto-junto a una mujer rubia que debía ser tu madre. Por tu postura y tu mirada, creí entender que la situación no era nada cómoda para ti. Además, Stevens puede llegar a ser muy…dejémoslo en…pedante-no puedo evitar que se me escape una sonrisa-La cuestión es que, cuando te ví, algo se movió en mi interior. Yo quería saber tu nombre, todo sobre ti. Un chico me dijo que te llamabas Alexandra, pero que te gustaba que te llamaran Alex. Alex. Me quedé con tu nombre grabado en la memoria, esperando un buen momento para ir a hablar contigo. Resulta que hoy iba a ser ese día-esbozó una sonrisa amarga-pero Stevens es peor que mil cuchillos ardiendo atravesándote el cuerpo y me tocó bastante las narices. Estaba de tan mal humor, que cuando me di cuenta de que eras tu, ya era demasiado tarde para parar de hablar. Y luego empezaste a decir eso sobre mí, y la verdad, te mentiría si te dijera que no me enfadé. Me dije a mi mismo que no tenía por que hablarte, aunque esa idea no fuese de mi agrado. Pero cuando Ben vino a decirme que había una pelea…bueno, intenté no pensar en que fueras tu, pero allí estabas, tirada en el suelo, sangrando, siendo pateada de forma totalmente injusta por Gertrude-el nombre de Gertrude me puso los pelos de punta, aunque después de las explicaciones de Adrian ya no me sentía tan responsable-y tuve que intervenir. Te cogí en brazos y te llevé a mi cuarto, seguido muy de cerca por tu amiga. Esperé a que te quitara el mono y se lo llevó a la tintorería. Entré en la habitación, y estabas completamente dormida. Te arropé y esperé hasta que despertaras-Sin previo aviso, Adrian me coge de la muñeca y me acerca a él- Ya sabes el resto.
Vale. Después de esta confesión tan sorprendente, comprendo mucho mejor el comportamiento tan esquizofrénico de Adrian. Y saber que él ya estaba interesado en mí…bueno, me anima bastante. Ahora nuestros labios están muy cerca. Casi puedo sentir el roce que se produce entre ellos. El aliento de Adrian es dulce, incluso parece de chuchería. Cierro los ojos, disfrutando del momento. Y entonces, cuando los abro, Adrian me besa. Sus labios son suaves, delicados conmigo. Abro un poco los míos para poder acoplarlos mejor a él. Me pasa una mano por la cintura y me atrae más hacia el, si eso es posible. Y descubro que lo es. Nuestros cuerpos parecen uno sólo, al igual que nuestra irregular respiración. Enredo mis brazos en su cuello y lo atraigo hacia mí, lo que hace que ambos caigamos al suelo. Ahora él está encima de mí, acariciando mi cara con una mano y mi cuerpo con otra. Allí por donde su mano pasa, una corriente eléctrica me sacude con intensidad. Fuera de mí, me deshago de su chaqueta de cuero, dejándolo nada más que con su polo gris que tanto se marca en sus músculos. Ahora, se que mi respiración está descontrolada, pero me da igual. Necesito de él como él necesita de mí. Por que lo percibo. Se que él quiere estar conmigo, y que me besa con tal intensidad por que así lo desea. Y eso me excita aún más. Adrian se separa de mí y abro los ojos. Respira con dificultad y me mira con esos ojos tan irresistibles.
Alex…-susurra, atrapando un mechón rebelde de mi cabello. Lo pone detrás de mi oreja con delicadeza. Luego, baja la cabeza y observa cada parte de mi cuerpo con el deseo pintado en los ojos. Sus manos bajan desde la parte inferior del pecho, y se deslizan por mi cintura, haciéndome estremecer y proferir algún que otro sonido placentero. Luego, sin más preámbulos, sus manos bajan hasta mis muslos y empiezan a acariciarlos. Es algo totalmente incomprensible para mí, pero deseo con todas mis fuerzas que siga, que haga lo que quiera conmigo. Decirle que soy suya, que le pertenezco, que todo lo que ve es para él. Quiero sucumbir a él.
Adrian también se estremece. Mira con detenimiento mis piernas, ligeramente entreabiertas. Se moja los labios. Luego, para mi total y absoluta sorpresa, se aleja un poco de mí me mira a los ojos.
-Creo…-empieza a decir, aún respirando con dificultad-creo que deberíamos parar.

Keee!!! Poor ke le dice ke deben parar???!!! Sigue!!

Que bien que has publicado,
¿por que quiere parar?

bueno quizas que esten en un prado desierto y que haga frio sea una razon...


quiero m´s, mucho más!!!

jeje!!!! ahora me tengo k ir al medico, pero cuando venga subo mas ok???besitosss!!!!

ayayayayay!!!!

que cosa che!!!

me puedes decir porq para????

me agarro un ataque!!!

segui!!!

bessoss

ola, ya he vuelto del médico y pongo un pokito massssssssssss!!!!!

Me incorporo con lentitud, apreciando que ya es completamente de noche. Miro a Adrian. Sus ojos ahora recorren de nuevo mi cuerpo, cada parte de él, sin dejarse nada.
Si tanto me desea, ¿por qué ha parado? Puedo verlo en sus ojos. las ganas de recorrer mi cuerpo con sus manos, de tocar mi cara, de besar mis labios…pero no la hace.
-Es de noche-se excusa, poniéndose en pie-y ya nos hemos retrasado lo suficiente como para que Joseph se percate de la desaparición de su moto.
Le miro por unos instantes, totalmente perdida, pero luego asiento, y me pongo de pie no sin dificultad. Claro, como no, yo, siempre haciendo gala de mi equilibrio, me tropiezo con una piedra y por poco caigo al suelo…pero Adrian me coge antes de la catástrofe. Sus manos agarran mis hombros, y nuestras caras están a muy poca distancia. Nos miramos a los ojos, y puedo sentir…que él quiere besarme.
-¿Por qué no me besas?-le pregunto, en un susurro. No se porque susurro, pero en fin…
Adrian parece sorprendido, pero no me suelta, si no que me mantiene a la misma distancia.
-¿Cómo?
-Puedo ver que te mueres por hacerlo-explico yo, un poco cohibida. No soy la máxima autoridad mundial hablando de sentimientos-pero no lo haces.¿Por qué?
Adrian parece perplejo, pero sus ojos no muestran confusión alguna. Pasan de mis ojos a mis labios. Pero repentinamente, me suelta.
-Es tarde-dice, metiéndose las manos en los bolsillos-no quiero que Stevens se ensañe contigo-y dicho esto, empieza a caminar hacia la moto. Después de unos segundos quieta, me muevo tras él, siguiéndole en la oscura noche.

El viaje de vuelta no es tan excitante como el de ida. La primera razón: por que es de vuelta. La segunda: por que Adrian está muy rígido, no habla y va demasiado rápido.
Cuando llegamos a la parte de atrás, bajo de la moto con dificultad, pero no necesito la ayuda de Adrian.
Si tiene que ayudarme a entrar por la ventana, pero se las apaña para tocarme lo mas mínimo. Me pongo furiosa. El motivo es claro: se comporta como los típicos tíos que solo te quieren para sobetearte y que te cuenta un royo solo para poder estar contigo. Perfecto. Es decir, genial. Resulta que todo lo que me ha contado sobre mi, y sobre que quería conocerme, saber mi nombre, bla, bla, bla…no eran mas que patrañas. Maravilloso. ¿Desde cuando me había convertido yo en alguien tan iluso?
Furiosa, pongo los pies en el suelo y ni siquiera espero a que Adrian baje. Cruzo la habitación con un estrepitoso ruido de tacones y salgo por la puerta.
-¡Alex!-escucho que me llama Adrian, no lo suficiente alto para que lo escuche nadie salvo yo.
Le ignoro. Eso es lo que voy a hacer a partir de ahora. Ignorarle. No quiero saber nada de él. No quiero convertirme en otra de sus adquisiciones. Ahora lo entiendo todo. ¿Por qué no ha querido besarme antes? Porque en realidad no le gusto. Solo quería toquetearme un poco, pero nada serio. Tonta, tonta, tonta…
Decidida, giró a la derecha para subir las escaleras…pero una mano conocida me agarra por detrás y hace que mi espalda de contra la pared.
-¿Pero que te pasa?-pregunta Adrian, sus manos apoyadas en la pared, sus brazos una prisión infranqueable.
Meneó la cabeza, reacia a contestar. Intento escabullirme por debajo de sus brazos, pero el lo impide acercándose mas a mí, apretándome mas contra la pared. Alzo la cabeza, indignada.
-Déjame-digo, intentando apartarle con las manos, pero es como intentar mover una estatua. Además, mi delgaducha complexión no tiene nada que hacer contra Adrian. Vaya, ni contra Adrian ni contra nadie.
-¿Qué es lo que ocurre?-inquiere. Sus ojos negros no dejan de observarme con intensidad.
Cabreada, le miro a los ojos, y se lo suelto todo.
-¿Que qué ocurre?. Yo te diré que ocurre. Yo no soy una de esas chicas facilonas, Adrian. No soy un objeto. Soy una mujer, y como tal, así debes tratarme. Y no es nada educado cogerme como me has cogido en el prado…y….bueno, y dejarme como me has dejado, como su fuera un trapejo sucio y como si…-pero no logro terminar la frase. Adrian posa un dedo sobre mis labios, silenciándome. Me mira, serio. Traga saliva y posa la otra mano en mi pelo.
-Alex…-murmura, acercándose a mí con lentitud, nuestros labios a escasos centímetros-cállate.
Vale. Me callo. Me callo por la impresión de tenerlo tan cerca de mí, como en el prado. Su boca está muy cercana a la mía. Tanto que si me alzara, podría besarle. Pero hace unos diez segundos había no volver a hablarle…y ahora quería besarle. ¿Tendría constancia de los sentimientos tan contradictorios que despertaba en mi? Su mano recorre mi cara, mis pómulos, mi nariz, mis labios…inexplicables corrientes eléctricas me sacuden allí por donde sus dedos me rozan.
-¿Quieres que te bese?-pregunta, su voz, un suave ronroneo. Cierro los ojos, disfrutando de la placentera sensación de sus dedos acariciando mi rostro. Inconscientemente, alzo la cabeza, hacia sus labios, y puedo notar su respiración en los míos. Asiento lentamente con la cabeza. Claro que quiero que me beses-pienso, con la respiración acelerada.
Ahora, Adrian vuelve a besarme. Pero si estaba esperando el mismo beso dulce del prado, estaba totalmente equivocada. No me da tiempo ni de coger aire. Adrian me besa con ferocidad, con deseo reprimido, como me suponía. Me coge por sorpresa, y exhalo una exclamación, que queda ahogada repentinamente cuando Adrian me alza y me coge en brazos, empotrándome contra la pared. Enrollo mis piernas en su cintura y paso mis brazos por su cuello. Adrian se separa de mí un segundo.
-¿Es esto lo que quieres?-me pregunta, con la respiración agitada.
-si…-respondo. Le atraigo hacia mi y le beso con la misma ferocidad que él a mí.
Ejem…-escucho un carraspeo a nuestra derecha, y Adrian se separa de mi con rapidez. Me baja al suelo, pero no me suelta la mano.
Miro hacia el origen del carraspeo y me encuentro con un chico de pelo azul oscuro (teñido obviamente) y de ojos relucientemente brillantes, también azules. Va vestido de negro, con una chaqueta de pana y unos pantalones con algunas costuras. Tiene un pircing en la oreja y es alto, más o menos como Adrian. Nos mira con una mueca divertida.
-Ya veo que no pierdes el tiempo por aquí, Adrian-dice, acercándose a nosotros.
Adrian da un paso adelante, dejándome atrás, pegada a la pared.
-Joseph-dice Adrian, y no puedo evitar notar un tono amargo en la voz de Adrian-¿Qué haces por aquí tan tarde?
-Lo mismo podría preguntarte yo a ti ¿no?-repuso Joseph, divertido-aunque-me echa una breve mirada-no me hace falta preguntar, por lo que veo.
Adrian ríe, pero no es para nada una risa divertida.
-He cogido tu moto, solo por…si te interesa, ya sabes-dice Adrian, parándose en seco.
-Me he dado cuenta cuando he salido y no había rastro de ella-dice Joseph-aunque podría perdonarte…si me presentas a tu amiga-me señala con la cabeza.
Adrian se gira para mirarme, y me hace una seña con la mano para que vaya hacia ellos. Obediente como pocas veces, camino hacia ellos y coloco al lado de Adrian, frente a Joseph. Ahora que lo veo desde más cerca, aprecio que es muy guapo. Parece como si el color de pelo estuviese hecho para él. Y sus ojos son hermosos…aunque no posee la belleza enigmática de Adrian.

Como te digo Q... ME HE QUEDADO LOCAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!11 MUERTA ME HAYO DIOS MIO CUANTO..CUANTO...AMOR!!! MENUDA LUJURIA jajjajaaajaa uff...Claudia jajaja supongo Q eso fue en su dia un sueño movidito jajajaa (sin ofender xD) tQ

jajaja!!!!si....un sueño en el que el protagonista era...un joven cazador de sombras de pelo rubio y ojos de leon, de nombre Jace....en fin.....JAJAJAJA!!!!!!! uff!!!!!no veas, Alex sa quedao....!!!!jajaja!!!!! oye yoli, y tu histori k??? no la ibas a subir???a mi desde q me contast de que iba, mas dejao.....
Necesito tu historiaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!TQQQQQQQQQ!!!!!!!!

Jjajajajaajaj Creo Q yo e tenido un sueño parecido...
Pues ya ves. Organizandolo todo jaja esQ se me ocureen mas y mas ideas..uff..pero tranQuila jaja la dsubire Prometido!!

eso, eso, q me lo prometiste eh? jejeje!!!
una cosilla!!!pásate por tu presentación, que ojeando la he visto y te he escrito algo
a ver si estás de acuerdo.....jusjusjusjus
jajaja!!!!besitossss!!!!!!

Weeeee!! =D ya lo vi snif..snif..Q emotivo jajajaa

jejeje!!!!! si, pues la contestación....snif.....Hermanaaaaaaaaaa!!!!bueno, pero leee lo que te he contestado.....
besitosssss!!!!tq!!!!

Q xulo!!

me gusto mucho!!!

espero q publiques pronto1!!!

ayayayay!!!

me quede...

q inoportuno ese joseph!!!

habrá un triangulo amoroso??

no quelo eso....

me gusta mas adrian!!!

segui!!

bessoss

Jajaja, no me extraña nada, a saber cuanto tiempo lleva Adrian en esa "carcel"...
Ese Joseph... en fin demasiado inoportuno (si me hubiese pasado a mi me hubiera puesto roja como un tomate ) porque en fin no quiero decir que le estaba "montando" asik digo que le estaba rodeando con la piernas (más fino)

bess wapa hasta otro trozito..